Poemas IV

Déjame besarte y beber de tu veneno
Porque soy inmune a el
Déjame ser un iluso eterno
Dame placer como el momento aquel
Cuando me llevabas a tu infierno
Donde el amor quema más que el calor
Y todo es sublime obsesión
Sacia mi necesidad
Lléname del más puro placer
Llévame contigo una eternidad
Que no tengo nada que temer
Como sirena a la brisa
En tu templo divino me quiero perder
Sedúceme con tu mirada que hechiza
Ahógame en tus aposentos de algodón
Desgárrame la piel a besos
Que no quiero tu perdón

Quiero volar

Si deseo volar mientras dure mi vida
Necesito ser una paloma
Tu mis alas que me eleven al cielo
Para que seamos solo uno
Y que lo nuestro sea eterno
Para alcanzar la felicidad no necesito
Que un milagro del cielo caiga
Pues tú eres un ángel y contigo me basta
Para seguir soñando no necesito una cama
Necesito un sublime beso
Y descansar en tus brazos
Porque eres mi almohada
Y si pensara en pedir un deseo
No necesito implorar al cielo
Porque tú eres mi Ada
Si estoy débil y derrotado
No importa el dolor que sienta
Porque estas a mi lado
Tu gran virtud ser demasiado tierna
Como el pétalo de flor
Tu piel al hacer fricción con la mía
Me llena de furor y exalta mi alma
Solo tus palabras
Me hacen comulgar con la calma